Francisco Guerrero, músico y compositor sevillano de gran importancia y quien traspasó su fama no solo fuera de Andalucía, sino también fuera de España.
Guerrero nació en Sevilla en mayo de 1528, siendo su padre Gonzalo Sánchez Guerrero, pintor aventajado por aquellos tiempos. Ya desde muy niño Guerrero, mostró grandes aptitudes por la música, recibiendo las primeras lecciones de su hermano Pedro, para más tarde ser discípulo del maestro Cristóbal de Morales, de gran fama en su época.
En 1545, se encontraba vacante la plaza de Racionero de capilla de la Catedral de Jaén. Guerrero a pesar de lo joven que era ya tenía terminado sus estudios, por esto se presentó a hacer oposición, las que ganó y con gran notoriedad permaneció en Jaén hasta 1548, en que volvió a Sevilla para ver a sus padres.
Fue por este tiempo cuando el Cabildo Catedral ya tenía conocimiento de la fama de Guerrero, ofreciéndole a su llegada a Sevilla una plaza de cantor, que aceptó y no volvió a Jaén, muriendo en la ciudad que lo vio nacer un 8 de Noviembre de 1599. Su cuerpo esta sepultado en la capilla de la Antigua de la Catedral de Sevilla, donde se puso por orden del Cabildo una laudatoria inscripción en su sepulcro.
Las primeras noticias biográficas que se tienen del gran Guerrero fue gracias a su amigo el pintor y literario Francisco Pacheco, y para terminar diremos lo que dijo un crítico: La música de Guerrero tiene, <<devoción, gravedad y corrección>>.
Fue por este tiempo cuando el Cabildo Catedral ya tenía conocimiento de la fama de Guerrero, ofreciéndole a su llegada a Sevilla una plaza de cantor, que aceptó y no volvió a Jaén, muriendo en la ciudad que lo vio nacer un 8 de Noviembre de 1599. Su cuerpo esta sepultado en la capilla de la Antigua de la Catedral de Sevilla, donde se puso por orden del Cabildo una laudatoria inscripción en su sepulcro.
Las primeras noticias biográficas que se tienen del gran Guerrero fue gracias a su amigo el pintor y literario Francisco Pacheco, y para terminar diremos lo que dijo un crítico: La música de Guerrero tiene, <<devoción, gravedad y corrección>>.
