Hace un tiempo estuve en una pequeña tertulia que se improvisó en un evento en el cual salió el tema de Cofradías, fíjense que bien, yo que no me callo ni con Hitler había un estúpido que consiguió que me callara. Claro, yo en verdad lo hice porque hay veces en la vida que si uno le da explicaciones a un estúpido ignorante se pone a su altura e incluso peor, ya lo decía Santa Teresa, <<la ignorancia hace hablar al hombre>>.
Total, a lo que íbamos que me aburro coño, que un impresentable el cual se encontraba en mi mesa, muy cerquita mía pero sin pretender meterme mano porque lo hubiera metido en el cuadro de enfrente. Empezó a decir que las Cofradías de serio o de negros son las que había que ver, porque las de barrio no daban la nota que deberían de dar, vamos, la misma que estaba dando este energúmeno que no ha leído absolutamente nada de Cofradías, si no hubiera entendido su metedura de pata, cuando las Hermandades o Cofradías de barrio muchísimas tienen más historia y antigüedad que las referidas por el estúpido.
Además, esto es como los toros, si todas las Cofradías fueran iguales la gente se aburriría y por supuesto nos perderíamos grandes Hermandad o Cofradías que sin ellas la Semana Santa no tendría sentido, igual que la existencia de este ser extraño que cerquita de mi estaba.
