La Capilla Sacramental de la Iglesia de San Benito.


La Capilla Sacramental de la Iglesia de San Benito fue bendecida el de 5 de Junio de 1961 por el Cardenal Bueno Monreal, en la que vemos un retablo de estilo barroco tallado por Antonio Martín y dorado por Antonio Díaz en 1961. 

En el retablo se encuentran las imágenes de la Hermandad de San Benito del Señor de la Sagrada Presentación, la Virgen de la Encarnación y San Juan Evangelista. Y en su ático una pintura de principios de este siglo de Juan Antonio Blanco del Cristo de la Sangre, como también el bellísimo Sagrario de plata de ley bajo el Señor de la Presentación del muy afamado orfebre Fernando Marmolejo.

Destaca de esta Capilla Sacramental el zócalo de azulejos trianeros de la fábrica de Ramos Rejano, pintado por Juan Oliver entre 1954 -1961.

Retablo y azulejo de la Capilla Sacramental .


El retablo mayor de la Iglesia de San Benito


El retablo mayor de la Iglesia de San Benito es de estilo neoclásico, con banco, dos cuerpos y ático. 

Dicho retablo está policromado imitando al mármol jaspeado, encontrándose en su camerín central la Virgen de Valvanera, imagen del siglo XVII y titular de la Hermandad de Gloria con cuatro pinturas a sus lados de este siglo, que representan a Santa Justa, Santa Rufina, San Pablo y San Hermenegildo.

En el segundo cuerpo del retablo vemos en una hornacina a San Benito Abad, imagen anónima del siglo XVIII, junto con dos pinturas también de este siglo que representan a San Isidoro y San Leandro. Y en el ático, la imagen de San Fernando de José de Medinilla de principios del siglo XVIII.

Retablo mayor de la Iglesia de San Benito.

Magna.


No a ninguna Magna más a más de 40° grados. Pero si a un buen Magnum.

Fotógrafos.


Algunas cerdas se creen que por  hacer fotos a una imagen tienen que ser veneradas de cuerpo entero. Yo les digo, al igual que a muchos prepotentes y guarros fotógrafos, que ya bastante hacemos con poner el nombre del autor de la foto cuando la firma se encuentra. Otra cosa no podemos hacer. Pero si lo que ya queréis es que os pongamos unas velitas, que os  la ponga quien yo me sé: San CARAJO.

La casa de todos.


España siempre fue como la casa de todos. Cosa que no hay que confundir con hoy, que es como la casa de putas de todos los indeseables.