Circo.


España es el unico País que no necesita un Circo. Ya Ella lo es por sus gobernantes.

Yo apostaría.


Yo apostaría por un Presidente como Cantinflas. Culto, bueno y con principios, lo que le falta a muchos.

Es la mujer.


Es la mujer la única que puede separar una verdadera amistad entre dos amigos.

Dos amigos.


Cuando veo a dos amigos tan amigos, y veo a la vez que todo es mentira en la vida, solo puedo pensar, que están tan unidos por algún interés.

Curiosidades de Papas. El otro Juan Pablo II.


El Papa Juan Pablo II, Santo de devoción para muchos y no tanto para otros, fue el primer Papa polaco como también el primer oriundo de un país comunista, y también fue quien por primera vez llevo un reloj de pulsera y leer sin gafas. Algo anormal, porque al leer tanto lo más normal es que utilicen estos religiosos lectores engañadores muchos siempre unas gafas por trabajar excesivamente la vista.

Y la cosa sigue. Pues práctico el esquí, escaló montañas (no sé si las de la fe porque no le pregunté nunca) y llevo alguna vez que otra una canoa de remo. Es el primero al igual que en las actividades antes citadas, que ha predicado en polaco en el trono de San Pedro y el primero de su época en cantar el complicadísimo Ite Missa est. Un todoterreno, que más de una marca de coche quisiera tener uno tan fuerte como el Papa polaco.

A nuestro Papa le gustaba comer, y cuando digo le gustaba comer, me refiero a desayunar un plato de jamón con huevos y no un cursi café italiano con un pan chiquito. No, este quería a San Jamón. El pan chiquito y el café para los italianos cursis, siendo en todas estas facetas el primer Papa que daba el paso, un paso, que solo unos cuantos se lo pueden permitir por su poder, santidad o como quieran llamarlo.

Algunos de los que leerán esto, se dirán que el buen hombre es un ser humano y tiene también derecho, por supuesto que sí. Pero luego que no prediquen con tanta empalagosa humildad la Palabra de Dios, porque es lo que hace que no nos creamos un pimiento. Y para terminar y no cansar más, agárrense aquellos que no lo sepan lo que ahora os cuento. Fue nuestro queridísimo y muy respetable el Papa Viajero, el primero que ha lucido una indumentaria firmada por un prestigioso afamado diseñador de modas de París, ¿ven esto normal? porque yo no, ¿o es que hasta a un diseñador de moda necesitaba con el hambre que hay en el mundo? Claro, que luego, cuando fue herido de un tiro en la calle estuvo en un hospital público, sería para callar bocas ¿no?.

Dos pinturas de Ignacio de Ríes en la Catedral.



Estas dos Bellas pinturas se encuentran en la Capilla de San Antonio de la Catedral de Sevilla. La primera que vemos representa a Santa Justa y Santa Rufina, en un óleo sobre lienzo de 86 x 146cm. obra del pintor Ignacio de Ríes.


Y en la segunda foto vemos a San Isidoro y San Leandro, en un óleo que también se encuentra en la Capilla de San Antonio al igual que las Santas Justa y Rutina. También de 86 x 146 cm. del mismo artista.

La Gloria de Juan de Roelas.



Esta maravillosa y conseguida pintura de la Gloria se encuentra en la Catedral sevillana, la segunda pinacoteca más importante de Sevilla después del Museo de Bellas Artes, la que ni siquiera conocen muchos estudiantes, que además estudian Historia del Arte, así es por muy increíble que nos parezca.

La Gloria es obra del pintor Juan de Roelas, en la que podemos apreciar una clara influencia que la escuela veneciana ejerció en la producción del artista, por lo que está obra toma influencia del pintor veneciano Tintoretto de la Coronación de la Virgen. Una obra digna de ser visitada y a la vez admirada, no las mamarrachadas de exposiciones de estos últimos tiempos de artistas mamarrachos, que plasman sus locuras en un lienzo y se lo creen.

La Inmaculada de Francisco Pacheco de la Catedral.



Esta bellísima representación de la Inmaculada se encuentra en la Catedral sevillana, obra del conocido pintor Francisco Pacheco hacia 1621 en óleo sobre lienzo.

Pacheco crea de esta Inmaculada una imagen de María rodeada de sus atributos, descritos en la Letanía: con manto azul, corona de doce estrellas, Ángeles rodeándola y de pie María sobre una luna. 

Como se ve en el cuadro, la Virgen aparece en el sublime cielo de Sevilla. En el ángulo inferior izquierdo se contempla la silueta de la Torre del Oro y detrás la gran Giralda, que junto a estos símbolos de Sevilla está el conseguido retrato de Miguel Cid, personaje que encargó y donó el maravilloso cuadro.

La Puerta del Príncipe de la Catedral.



La Puerta del Príncipe de la Catedral sevillana es también conocida como la de San Cristóbal, la cual se encuentra en la fachada sur, frente a la Lonja, actual Archivo de Indias. Esta puerta se construyó entre 1887 y 1895, bajo la dirección del arquitecto Fernández Casanova.

Delante de la Puerta se encuentra actualmente una copia del conocido Giraldillo.

El Tío Martinito.



No hay pueblos ni capitales importantes en Andalucía, que no tengan una leyenda. Como es el caso de una que sigue viva en la monumental y bella Carmona, la del Tío Martinito que a continuación contaremos, la cual está relacionada con los niños.

El personaje que se describe en la leyenda, es el Tío Martinito, que habitaba en los pozos y las conducciones subterráneas de agua de Carmona. Este personaje de leyendas o realidad, le gustaba llevarse a los niños parece ser para comérselos o asustarlos hasta que entraban en chock, por lo que se desplazaba por el subsuelo de Carmona muy rápido y hábil apareciendo en un pozo y a la nada en otro al acecho de los pequeños.

Muchas veces se tenía que limpiar los pozos, introduciéndose en estos gente que contaron haber vistos sombras y escucharon ruidos extraños, relacionando todo esto con el diabólico Martinito. También se dice, que la leyenda se contaba a los niños más travieso para que no se acercaran a los pozos por el peligro que conllevan el asomarse y caer en su fondo.

Pero según otros testimonio, la leyenda proviene del Palacio del Marqués de las Torres de Carmona. Pues en este lugar fue donde nuestro diabólico personaje intento llevarse a un niño, que se defendió con una estatua de San Martín próxima a él y empezó a golpear al malvado Martinito, de ahí tomó su nombre de Martinito, de la estatua del Santo. Y como curiosidad comentar, que sobre los pozos se colocaban cruces, las que servían para protegerse de este aterrador personaje. Ya podría haber unos cuantos como este en el Gobierno y se llevara a todos.

El Palacio de los Aguilar.




La Casa-Palacio de los Aguilar de Carmona se levanta a finales del siglo XVII, en 1697, que es el año que se puede ver sobre el dintel de su puerta de entrada. Destacando de su interior las cubiertos de tipo mudéjar.

Es la portada de dos cuerpos de altura, la que está realizada toda en ladrillo tallado con dos hueco y una gran puerta en la parte inferior flanqueada entre dos grandes pilastras sobre pedestal  con capiteles de orden jónico.

El Palacio de los Ruedas de Carmona.



Es la Casa-Palacio de los Ruedas de Carmona una de las más espectaculares que tiene la ciudad, de estilo barroco y ubicada en el sitio de una antigua casa del siglo XVI. Esta Casa-Palacio está catalogada desde el 11 de Junio de 1983 como Bien de Interés Cultural en la tipología de Monumento.

 Como seguimos viendo, es para perderse un día cualquiera por las calles de Carmona y disfrutar de esa historia pasada, la que sigue gracias a la conservación de estos monumentos. Su portada principal es de dos cuerpos de altura curvo, obra del siglo XVII y principios del XVIII, donde aparece el escudo de su dueño, Luis de Rueda. 

El Palacio de los Marqueses de las Torres de Carmona.



Uno de los edificios más importantes de Carmona es la Casa-Palacio del Marqués de las Torres, adaptado y rehabilitado para sede del actual Museo. Es también conocida como Palacio de la Familia Quintanilla, siendo su arquitectura del siglo XVIII.

La construcción del edificio es de 1755, pero su origen es del siglo XVI . Un Palacio que posee caballerizas, apeadero, patio principal y jardines, otra casa más de las tantísimas que siguen existiendo en Carmona.
Destaca su portada de dos cuerpos de altura en la que aparece el escudo familiar de los Quintanillas, edificio que desde el 27 de Mayo de 1973, es catalogado como Bien de Interés Cultural  en la categoría e Monumento.


La Casa de las Cadenas de Carmona.


La Casa-Palacio de Alonso Bernal de Carmona es conocida como Casa de las Cadenas, por las que en su fachada vemos. Sin olvidarnos que también fue Palacio de los Turmo, magnífico e importantesimportante edificio barroco que en el siglo XVII llegó a se residencia del regidor local, y estancia elegida por el Rey Felipe IV en 1624 para pernoctar en la ciudad en uno de sus viajes.


Fueron las cadenas puesta en la casa como explicando de que la casa pasaba a depender desde que el Rey estuvo al foro real, siendo nulo el poder de la justicia local dentro de ella. Pero este privilegio duro hasta que en 1812 las Cortes de Cádiz eliminaron cualquier derecho de tipo medieval. La fachada del edificio es alargada y tiene dos plantas de altura.

El retablo mayor de la Prioral de Carmona .



El maravilloso y sublime retablo mayor de la Prioral de Santa María de la Asunción de Carmona es uno de los más importantes de Andalucía, retablo que se inició en el segundo cuarto del siglo XVI de estilo plateresco. Toda una auténtica joya dentro de otra como es Carmona entera. Esta formado el retablo por Banco, cuatro cuerpos de cinco calles y ático, separándose las calles mediante columnas cilíndrica todas decoradas.

Fue tallado el retablo a lo largo de su realización por varios artística de la talla de Nufro de Ortega, el que lo inició y Juan Bautista Vázquez, el Viejo, que lo finalizó en 1564. Corriendo la policromía y estofado de los relieves a cargo de Pedro de Villegas, Juan de Zamora, Gonzalo Vázquez, Pedro de Campos, Antonio Rodríguez y Andrés Ramírez. Todo un elenco de artistas reconocidos de la época.

Aparecen en el banco del retablo los Padres de la Iglesia: San Jerónimo, San Ambrosio, San Agustín y San Gregorio. Y en el primer cuerpo relieves policromados de escenas de la vida de la Virgen : Anunciación, Visitacion, Natividad, Adoración de los Magos y Presentación en el Templo. En el segundo cuerpo la Huida a Egipto, Jesús entre los doctores, la Virgen Madre, La Sagrada Cena, La Oración en el Huerto de los olivos y en el tercer cuerpo y cuarto el Beso de Judas, Flagelación, Caída de Jesús y Quinta Angustia.

Y en la calle central del tercer y cuarto cuerpo del retablo la Asunción de la Virgen en una hornacina. El Santo Entierro, Resurrección, Ascensión y Pentecostés. Mientras que en el ático vemos la escena de la Coronación de la Virgen y un Calvario arriba. Todos estos magníficos relieves son del taller de Vázquez el Viejo, y otros de alumnos bastantes aventajados. Si ya de por sí Carmona es más que recomendable su visita, este retablo aún más, sobre todo por la importancia que tiene en su talla y en los relieves del mismo, en los que grandes artista participaron para  esta monumental obra de arte, deleite de cualquier amante al Arte con mayúscula.


La Iglesia Prioral de Santa María de la Asunción de Carmona.



La maravillosa y portentosa Iglesia de la Prioral de Santa María de la Asunción de Carmona es uno de los templos más importantes sin duda alguna de Andalucía, de planta de salón, tres naves y capillas entre los contrafuertes, las que atesoran un inmenso y desconocido patrimonio. Se asienta la Iglesia en una antigua mezquita, la que conserva un bello patio de los naranjos.

Es la estructura de la Prioral de dos etapas en los siglos XVI y XVI, con la torre de cuatro cuerpos reformada en el siglo XVI y XIX. La primera hacia el año de 1425, que es cuando se derriba la antigua mezquita, y la segunda de 1515, donde interviene el afamado arquitecto Diego de Riaño, en 1542 interviene al frente de las obras Juan de Escalona, quien diseño la magnífica Capilla de la Virgen de Gracia, Patrona de Carmona.

También intervino en las obras de la Iglesia el maestro mayor de la Catedral sevillana, Hernán Ruiz hacia 1566. Quedando terminada en 1578 por Pedro Díaz. Una Iglesia en la que destaca sus bóvedas de crecería y la estrellada del cimborrio, con medallones de Ángeles y Santos. Por la importancia de esta gran Iglesia,  iremos hablando en otros apartados de sus capilla y enorme patrimonio.

País.


Se sigue en este país solucionándose todo con un partido de fútbol.

María Santísima de la Paciencia de Carmona.



Esta bella Dolorosa es titular de la Hermandad de la Sagrada Columna y Azotes de Nuestro Señor Jesucristo de carmona, la que radica en la Iglesia de Santiago.

La Hermandad tuvo una Dolorosa atribuida a José Montes de Oca, pero con el tiempo y sufrir varias restauraciones y encontrarse en tan mal estado, la Hermandad consultó al imaginero Francisco Buiza, y encargó a este una nueva Dolorosa. La que en 1953 hiciera el artista en madera de pino policromada y de candelero para vestir de 1,65 metros, costando 5000 pesetas.

Dicha imagen sigue el estilo de  Buiza, representándola con cinco lágrimas, pelo tallado y moño. Destacando sus conseguidos labios entreabiertos y los dientes tallados.

La Iglesia de Santiago de Carmona.


Es la construcción de la Iglesia de Santiago de Carmona del siglo XIV, la que se levanta sobre una antigua mezquita de la que se conserva el alminar de su Torre. Esta Iglesia al igual que muchas otras ha sufrido varias restauraciones a lo largo de su historia, como la de los siglos XV, XVI y XVII.


Tres puertas posee la Iglesia de Santiago, siendo la más interesante la que se encuentra situada a los pies de estilo mudéjar. Y junto a esta portada la torre, mudéjar en dos cuerpos con decoración de sebka en el superior.


La Iglesia es de plata basilical, realizada en piedra y ladrillo, con tres naves separadas por arcos apuntados que acaban en sendos ábsides poligonales. Destaca del templo su retablo mayor , obra de estilo barroco que preside el Apóstol Santiago y San Fernando. Contando la Iglesia con Capillas como la de las Nieves, la de Belén, la bautismal y la Sacristía.

María Santísima de la Esperanza de Carmona.



La imagen de María Santísima de la Esperanza pertenece a la Hermandad del mismo nombre de Carmona, talla anónima de principios del siglo XVIII. Una imagen que ha sido restaurada en varias ocasiones como en el año 1971 por José Rodríguez Rivero-Carrera, y en la década de los 90 del siglo pasado por Fernando Fernández Goncer.

Se venera María Santísima de la Esperanza en la Iglesia del Salvador, la cual procesiona todos los Domingo de Ramos por las calles de Carmona. Como curiosidad comentar, que las actuales manos de la Virgen son del imaginero de Carmona Antonio Eslava Rubio.

Nuestro Padre Jesús de la Divina Misericordia de Carmona.



Es Nuestro Padre Jesús de la Divina Misericordia obra del imaginero Jesús Iglesias en 1998. Imagen que fue bendecida el 23 de Octubre de 2010. 

Si nos fijamos bien, nos daremos cuenta al instante, que la imagen está inspirada en el Señor del Gran Poder de Sevilla, obra cumbre de Juan de Mesa.

La Iglesia del Divino Salvador de Carmona .


Esta Iglesia del Divino Salvador se encuentra en Carmona, la que se construye sustituyendo a otra anterior de 1617 fundada para el Colegio de San Teodomiro de la Compañía de Jesús de Carmona. Encomendándose sus trazas en 1699 al gran arquitecto Leonardo de Figueroa, siendo Pedro Romero el Viejo quien se encargó finalmente de la trazas de la nueva Iglesia de planta de salón, tres naves y crucero.


El actual templo que conocemos es de 1700, por lo que el hijo de Pedro Romero el Viejo,  Félix Romero lo sustituye en la dirección de las obras. Es la Iglesia de planta de cruz latina de tres naves, crucero y cabecera plana, y sus naves laterales se cubren con bóvedas de aristas, estando la central, el crucero y la capilla Mayor con bóveda de cañón con lunetos. Destaca de este monumental conjunto su espectacular retablo mayor del siglo XVIII, de estilo barroco. Un retablo que está presidido por el Sagrario y las imágenes del Salvador y San Teodomiro, mientras que en el primer cuerpo vemos a San Miguel y San Grabiel, y en el segundo dos medallones con los bustos de San Pedro y San Pablo con las cuatro alegorías.


Un templo que desde su exterior ya nos cautiva con sus portadas de estilo barroco. Pocas ciudades y pueblos pueden presumir y sentirse tan orgulloso como Carmona, un joyero de arte e historia a la espera de que andaluces lo visiten y conozcan antes que alguna hortera playa del extranjero.

El Cautivo de San Pedro de Carmona.



En la Capilla de San Francisco de la Iglesia de San Pedro de Carmona en el lado del Evangelio podemos ver a esta más que interesante imagen, la de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Belén. La que se encuentra en un retablo del siglo XIX de estilo neoclásico de un solo cuerpo con una hornacina en el centro ocupada por dicha imagen.

Es obra el Señor Cautivo de Belén atribuida a Pedro Roldán el Mozo en 1716, gran talla de candelero para vestir con un rostro humilde y sereno. Esta imagen proviene de la Iglesia de Santiago, de donde rescataron de un estado pésimo de conservación los cofrades de la Hermandad de las Angustias, que lo restauraron y paso a ser titular de la Corporación.

La imagen del Señor Cautivo de Belén, procesiona en Vía Crucis todos los años en Cuaresma y en el Corpus en un paso como si fuese el Señor en la Última Cena. Como ven, otra gran imagen más de las muchísimas que atesora Carmona, pueblo con un rico patrimonio e historia.

La Virgen de los Dolores de Carmona.



Esta maravillosa imagen de la Virgen con la advocación de los Dolores pertenece a la Hermandad del Nazareno de Carmona, tierra con un inmenso patrimonio religioso que ya quisieran algunas capitales tener.

La cabeza y las manos de la Virgen fueron realizadas en 1696 por José Felipe Duque Cornejo, y encarnada por su mujer Francisca Roldán, nieta del conocido Pedro Roldán e hija de la famosa Luisa Roldán, conocida como "La Roldana". Terminando la imagen Juan del Castillo.

La imagen es de candelero de tamaño natural, con una encarnadura blanca tirando a pálida y rostro de mujer madura, nariz recta y ojos sobresalientes marcados por el dolor de una madre. Una imagen digna de procesionar por la bella Carmona.

El Cristo Yacente de Francisco Buiza de Camona .



Es la Hermandad del Santo Entierro de Carmona la que encargaría en 1971 al afamado imaginero de la localidad Francisco Buiza la imagen del Señor, el que escenifica el momento que el cuerpo de Cristo es depositado por José de Arimatea y Nicodemo en la losa sepulcral.

Dicen, que Buiza para la realización de la imagen del Cristo Yacente se inspiró en el maravilloso grupo escultórico de Juan de Juni (1571) de la Catedral de Segovia. Una grandísima imagen, que como tantas otras de nuestra Andalucía pasan muy desapercibidas.

La policrimía del Cristo es de un tono marfileño y cadavérico.  Con mucha sangre y magulladuras que impresionan bastante, sin desentonar absolutamente nada en la anatomía de cuerpo.

Enemigos.

Quien enemigos no tiene, en su puta vida ha dicho la verdad.

Iglesia de San Bartolomé de Carmona.



Data la construcción de la Iglesia de San Bartolomé de Carmona del siglo XV, la que tuvo unas grandes reformas en el siglo XVIII, época del barroco. Su interior es de planta basilical con tres naves, siendo la central más ancha y alta.

Las tres naves se cubre con vigas de madera, destacando su bello retablo mayor de estilo barroco. Y al igual que tres naves tiene, con tres portadas cuenta en su exterior, sobresaliendo de estas la de la nave de la Epístola, con arquivoltas de arcos y apuntados y jambas baquetonadas, realizadas en ladrillo.

Y a los pies del templo se levanta una gran torre-fachada de planta rectangular, donde se incluye una Portada adintelada entre pilastras rematada por un frontón partido coronado por pináculo. Contando en su cuerpo superior con un pedestal enmarcado entre volutas barrocas con una terraza abalaustrada sobre la que se alza el cuerpo de campanas.

El Hospital de la Caridad de Carmona.



Otra maravillosa joya podemos ver en esta bella Carmona como es el Hospital de la Caridad, fundado como hospital de pobres en 1510, mediante bula papal del Pontífice Julio II. Se ubica en unas casas que fueron de la propiedad de la Duque de Arcos doña Beatriz Pacheco, quien las donó para el Hospital de la Santa Caridad y Misericordia de Nuestro Señor Jesucristo, que hizo constar en testamento el 5 de Abril de 1511.

El Hospital como la Hermandad que lo dirige se encuentra asociado al conocido Hospital de la Caridad de Sevilla, guardando en su archivo algunos interesantísimos documentos de su benefactor, Miguel Mañara. Destaca de esta joya como es el Hospital la sala Capitular y su Capilla, la que atesora en su interior obras de incalculable valor, como el retablo mayor con una pintura sobre la Visitacion de la Virgen a Santa Isabel, atribuida a Murillo, con un magistral marco barroco. Un San francisco del Gran Zurbarán y una interesantes pinturas en cobre que representan los artículos del Credo donadas por la Marquesa de Saltillo en el siglo XVII .

Aún con este enorme patrimonio, lo más conocido de todo es su única e irrepetible portada barroca rematada por una espadaña, la que dan una belleza sin igual a este desconocido monumento para muchísimos andaluces por desgracia, una pena salir fuera de Andalucía sin conocer casi nada de ella. El azulejo central si se fijan bien, representa un corazón en llamas con una Cruz, que es el emblema de la Santa Caridad fundada por Mañara.

Funcionarios chulesco.

Hace tiempo que quería escribir algo sobre estos funcionarios chulesco, los que una gran mayoría se creen semidioses. Pero por tiempo o por desidia lo dejé pasar, hasta que me han tocado los cojones como se lo habrán tocado también a usted no solo una vez, sino unas cuantas veces, y siempre en plan chulesco, importándole un pito que gracias a nuestros impuestos comen los muy ca...rajotes.

Llegue uno a donde llegue siempre se topará con uno de estos funcionarios chulesco, a la oficina tal, a la otra, a esta y a la de su puta madre, casi siempre por no decir siempre tendrá algún problema con un imbécil de esta especie en esta quijotesca España, siendo luego los que más derechos piden. Yo les haría caso, pero esos derechos que piden se los daría en formación, educación y vocación, un estilo a los médicos y a los curas, de los que siempre se han dicho que si no tienen vocación nada hay que hacer. Claro, que hay un gran problema, pues cuando uno ve que muchísimos médicos como curas no tienen vocación uno se pregunta en alto, ¿en que país vivo?. Cuando alguien cerca le responde, en un mojón lleno de moscas cojoneras.

Contar problemas que hayamos tenido algún día de nuestra vida con algún funcionario sería no terminar nunca, claro que también se dirán ustedes que por uno tampoco pasa nada, y llevan razón, por uno no pasa nada pero contar más de uno sería caer en la estupidez, creo que aparte de aburrir sería empalagoso cuando con sólo un caso todo se entiende a las mil maravillas, que es el que a continuación contaremos, ¿para que alargar más esta agónica guerra contra funcionarios?.

Fue un día ya del pasado frío invierno, cuando acudí con una persona a un Centro de Salud, que tras llamar varias veces para coger cita con su médico  se la daban, pero a los siete días, del carajo nuestra sanidad, y como esto todo. Ya en el centro nos atendieron como si fuésemos rumanos, perdón, como a monstruos, porque a estos los atienden del carajo, mejor que a uno siendo español y pagando más impuesto que un chulo a sus putas, que estas pobres algunas veces ni cobran, perdónenme amigas porque si hay alguien en esta asquerosa sociedad que os respeta soy yo. Así es este país y es lo que tenemos, la culpa no la sé, lo que sé es que no tenemos huevos para las cosas verdaderamente importantes, ahora, si hay algún partido de fútbol y no lo televisan se lía la de San Quintín.

Estuvimos esperando bastante tiempo en el Centro de Salud, los dos sentados a que nos llamara el doctor en un huequito porque íbamos por "Urgencias", palabra que se la pasan por donde ya saben. Comprendíamos los dos, que teníamos que ser paciente y esperar a un hueco, ya, pero es que se marchaban gente y el doctor seguía sin llamarnos cuando abajo nos dijeron otro chulesco funcionario que nos llamaría, no sé, a lo mejor estaría esperando a que uno de los dos se muriera para llamar al coche de la funeraria. Por eso decidimos entrar y decirle amablemente, buenas tardes no han dicho que usted nos llamaría y ahora no hay nadie, podemos pasar, todo con una exquisita educación que el engreído no conoció en su vida, y mirándonos fijos unos segundos a los ojos nos dijo, eso, ya os llamaré. Entonces fue cuando la gota colmó el vaso y le dije; si es que en este país para entrar en estos sitios hay que se rumano hijo, hijo de...

Convento de la Santísima Trinidad de Carmona




El Convento de las Agustinas Descalzas de la Santísima Trinidad de Carmona se encuentra en el interior del bellísimo recinto histórico. Funda la Comunidad está nueva sede en la localidad en 1629 por la donación de unas casas de la propiedad de Juana Camacho, levantándose su Iglesia casi un siglo después y encargándose del diseño el arquitecto Diego Antonio Díaz, Maestro Mayor del Arzobispado Hispalense en la primera mitad del siglo XVIII.

Comenzó la construcción de la Iglesia en 1718 hasta 1748, año en que finalizó. Esta maravillosa Iglesia como otras que Carmona atesora como su Convento están inscritos en la catalogación de Bien de Interés Cultural en la categoría de monumento desde el año 2005. Destaca su claustro de 1700 con galerías porticadas cubierta con alfarje mudéjar, con arcos de medio punto que descansan sobre columnas de mármol.

Es el interior de la Iglesia bastante acogedor, de estilo barroco y planta de cruz latina de una sola nave con crucero y Capilla Mayor. Con interesantes retablos y un coro bajo y otro alto. Pero lo que más destaca es el retablo mayor, obra realizada por Felipe Fernández del Castillo y Miguel de Gálvez hacia 1750-1758. Otro convento más de esta bella Carmona, de la que nunca nos cansaremos desde aquí, decirles que vayan a visitarla.

Pelotas.


Pelotas, rastreros e imbéciles es lo que mas abunda tanto en la vida como por las redes antisociales.

La Virgen de la Encarnación del Convento de Madre de Dios de Carmona.



Nos encontramos ante una de las imágenes más señeras de toda Andalucía por su historia y elegancia, la Virgen de la Encarnación de Carmona, un pueblo que siempre recomendamos visitarlo por su enorme patrimonio. Esta imagen está atribuida al afamado Jorge Fernández Alemán en el siglo XVI, quien participó en el monumental retablo mayor de la Catedral sevillana, llegando esta delicada y sublime imagen hasta nuestros días prácticamente intacta.

La Virgen de la Encarnación presidió la antigua Capilla del convento fundado en 1515 hasta la realización del actual templo que fue trasladada en 1570, presidiendo el retablo mayor hasta la realización de un nuevo retablo en 1632 por Jacinto Pimentel, donde actualmente se encuentra en el lado de la Epístola. Como verán, Carmona es todo un manantial inagotable de patrimonio.

El Convento de Madre de Dios de Carmona.



Se encuentra este bellísimo Convento en la calle del mismo nombre de la bella Carmona, en el casco histórico. El Convento está habitado por un grupo de religiosas dominicas desde 1516, conservando entre sus muros diferentes construcciones de los siglos XVI y XVII, del que destacamos un bello claustro de caracteres mudéjares que presenta una galería de arcos de medio punto que se apoyan sobre columnas de ladrillo.

Y cuando nos adentramos en su Iglesia, vemos al momento que pertenece a las típicas de los conventos sevillanos del barroco, siendo la Iglesia de una sola nave con dos portadas abiertas al exterior. Se cubre la nave con armadura de madera de pino, y con una bellísima cúpula con ornamentación barroco su presbirerio, con yeserías decorando sus cuatro muros que enmarcan pinturas de Santos Dominicos y escenas de la Orden. Estando el Coro Alto decorado con un espectacular artesonado mudéjar.

Del rico patrimonio que el Convenio tiene, nos dentendremos en su retablo mayor, obra de Jacinto Pimentel, contemporáneo del gran Montañés, que lo realizó en la primera mitad del siglo XVII, dorado y estofado por Jacinto de Soto. De las escenas y figuras del retablo se encuentran la Anunciación ,  La Trinidad en el ático, imágenes de Santos como Santo Domingo de Guzmán, Santo Tomás de Aquino, San Juan Evangelista y San Juan Bautista. Mientras que el banco presenta pinturas de San Vicente Ferrer y Santa Catalina de Siena. Muy recomendable la visita a este convento, no todo son las grandes catedrales, pues una grandísima parte del mejor patrimonio religioso se encuentran en sus Conventos, recuérdenlo.

La Virgen de la Piña de Carmona.



En la Iglesia de San Bartolomé de Carmona, la cual se encuentra en el el interior del Casco Antiguo y cerca de la Puerta de Sevilla y el Alcázar podemos ver a la fantástica imagen de la Virgen de la Piña. Una Virgen con un parecido enorme a la virgen del Amparo de Iglesia de la Magdalena de sevilla.

La Virgen de la Piña es obra de mediados del siglo XVI del grandísimo imagnero Roque Balduque, quien fue todo un maestro en la creación de Vírgenes con su inconfundible sello propio. Destacando de dicha imagen sus pliegues y la Piña que lleva en su mano derecha, la que le da su curiosa advocación.

Es esta obra de la Virgen, una de las más logradas que el genio de Balduque nos dejó en Andalucía. Imagen de una calidad insuperable y líneas que la caracterizan del mejor hacer del artista, toda una soberbia obra de arte digna e cualquier Museo.


El Cristo de la Amargura de Carmona.



El Santísimo Cristo de la Amargura es un impresionante Crucificado y único en su estilo, muy desconocido por muchos y al que podemos ver en la Iglesia de San Felipe en Carmona. Un Cristo que pertenece a la Hermandad del mismo nombre.

Fue realizado el portentoso Cristo de la Amargura por el escultor Jorge Fernández Alemán en el año 1521, en madera tallada y policromada, que aunque les suene a alemán, es una interesantísima imagen cristífera que tiene el honor de ser la más antigua documentada de todas las que procesionan en Sevilla y su provincia. Sin olvidarnos, que Fernández Alemán también participó en el retablo monumental de la Catedral sevillana.

Representa la imagen a Cristo muerto. De estilo gótico tardío con rasgos muy propios de la Escuela Sevillana de su época. Imagen que fue restaurada por el conocido imaginero de Carmona Francisco Buiza en 1967, quien le hizo la Cruz que actualmente tiene. Y por si alguien se anima algún día a verlo por las calles de Carmona, es su salida procesional todos los Lunes Santo, un privilegio poderlo ver en su paso en esta tierra la cual forma parte de ese inmenso Museo que es Andalucía.

La Virgen del Mayor Dolor de Carmona.



No solo hay grandes Dolorosas en Sevilla Capital, también las hay en sus pueblos y de una calidad importantísima como es la de la Virgen del Mayor Dolor de la Hermandad de la Amargura de la Iglesia de San Felipe en Carmona. Obra realizada en 1762 por el gran imaginero Benito Hita del Castillo, de candelero y tallada en madera de Flandes policromada.

La imagen de la Virgen fue en un principio realizada en busto con su manto esculpido sobre la cabeza, adaptándola a candelero un monje de la Comunidad Carmelitana de Carmona en 1925. Mide la Virgen 1,68 centímetros, y destaca de la misma su dolor en el rostro como la inclinación de la cabeza hacia el lado derecho mirando levemente hacia abajo con unas magníficas manos entrelazadas. Dolorosa de la que el pueblo de Carmona puede sentirte orgulloso de tener en su inmenso patrimonio.

Situación política.


Vivimos en una situación política en la que casi todos los políticos deberían de estar en la cárcel.

La Iglesia de San Felipe de Carmona.


Se encuentra esta maravillosa Iglesia de San Felipe de Carmona en el casco histórico, la que fue levantada durante el siglo XIV, representando algunas modificaciones en los siglos XV y XVI. Una Iglesia que según la leyenda, esta construida sobre una antigua mezquita, pero la arqueología ha demostrado que es imposible, porque en la época de la Roma Imperial dicho lugar estaría ocupado por casas.


La Iglesia es de estilo gótico-mudéjar, de tres naves separadas entre sí por arcos apuntados que se apoyan sobre pilares ochavados con columnas adosadas y artesonado de madera, con un retablo mayor de estilo barroco.


Pero si tuviéramos que destacar algo de la Iglesia sería su torre-fachada, en donde figura en una inscripción en azulejo en el cuerpo de campanas que se realizó en el año de 1572. Y a los pies de la torre su portada principal,  obra realizada por el arquitecto Martín García en año de 1468.

El Palacio de los Domínguez de Carmona.


Muchas veces hemos hablado de la bella Carmona, un pueblo con un patrimonio inmenso donde pasear por sus calles es transportarse a otro siglo. Donde existen Palacios e Iglesias llena de joyas. Como esta Casa Palacio de los Domínguez, la cual se encuentra situada dentro del Casco Histórico y Monumental, en un solar de esquina, mostrando al exterior dos fachadas desiguales.

La Casa Palacio fue levantada en el siglo XVIII, por lo que derribaron unas casas existentes. Hoy es este bello edificio habilitado sede de la Biblioteca Municipal de Carmona, donde se guarda la cultura en libros, esos que a una gran mayoría de nuestra sociedad le dan alergia leerlos. Pero luego saben de todo.

De estilo barroco es la Casa Palacio, de la que destacamos su fachada principal, de líneas geométricas de dos plantas de altura y su portada de acceso en ladrillo tallado. La que se estructura en dos cuerpos con una altura igual al edificio con el escudo de la familia Domínguez.

El Sereno Marchena de Triana.


Como bien sabemos, Sevilla está llena de leyendas, como la que a continuación contaremos del popular barrio de Triana, que tiene en la Capillita del Carmen del Puente de Triana su testimonio. Y se encuentra en la veleta de la Capillita, en la que vemos a un hombre con farol y un chuzo, el Sereno Marcherna, personaje que ejerció esta profesión a principios del siglo XIX en Triana.


Según la leyenda, y no nosotros cuenta, que una noche un toro que pasaba por el arrabal trianero guiado por los pastores camino de la Plaza de la Maestranza se descarrió de la manada. Es entonces cuando el Sereno Maechena fue avisando a todos los vecinos del peligro que corrían. Metido en su papel el Sereno, fue embestido por el toro en la calle Castilla, contando en la enfermería a su jefe lo sucedido, que el animal lo levantó por encima de los tejados de las casas.


Exageró tanto Marchena, que una vez que se recuperó su jefe le apodó como <<Veleta>>, quien encargó a la fundición Portilla & White una veleta con la forma de silueta del Sereno. Esta se colocó en la torre de la antigua Capilla del Carmen, y luego fue trasladada a la actual Capillita en 1928 del arquitecto Aníbal González. Una historia o leyenda, que nos relata aquella profesión hoy pérdida de los serenos, los que velaban por nuestra seguridad.

La Virgen del Carmen de la Capillita del Puente de Triana.



Esta imagen de la Virgen del Carmen la podemos ver en la Capillita del Carmen del Punte de Triana, obra del escultor Jesús Iglesia Montero realizada en madera de cedro en 1998.

La Virgen lleva al Niño Jesús en su mano izquierda, y en su derecha un cetro. Fue bendecida el 13 de Julio de 2003 por el Párroco  D. Manuel Gordillo Cañas en la Parroquia de la O.

Los Baños de la Reina Mora de Sevilla.



Grandes obras nos dejaron los almohades, como los Baños de la Reina Mora en la calle Baños anexo a la Capilla del Dulce Nombre de Jesús, donde reside la Cofradía de la Vera Cruz. Pocos son estos edificios que han logrado llegar hasta nuestros días, como estos Baños del siglo XII en esta Sevilla todavía muy oculta para muchos.


El antiguo conjunto está formado por un patio central rodeado de galerías de columnas, las que están dispuestas en torno a cuatro estancias rectangulares. Hay que decir, que estos Baños estuvieron funcionando después de la ocupación cristiana.


Gracias a Dios, que los Baños se respetaron y no se perdieron como otras tantas joyas, los que guardan una historia de esa Sevilla que se nos fue pero que nunca deberíamos de olvidar, en especial nuestros jóvenes. Dicho conjunto fue declarado Bien de Interés Cultural en 1996.

La Capilla del Museo.



La recoleta Capilla del Museo se encuentra en la Plaza del mismo nombre, contigua al Museo de Bellas Artes de Sevilla y antes Convento Mercenario, donde tiene su sede la señera Hermandad del Museo, que es la propietaria de dicha Capilla, cediéndola la comunidad mercenaria el 12 de Mayo de 1613.

Fue la Capilla sometida en el siglo XIX a varias restauraciones , siendo en 1985, cuando adquiere su actúa fisonomía, la que atesora varias imágenes de una gran calidad en su interior.


Maese Rodrigo Fernández de Santaella.


Maese Rodrigo Fernández de Santaella ante la Virgen de la Antigua de Alejo Fernández en el retablo de la Capilla de Santa María de Jesús .


Fue Rodrigo Fernández de Santaella y Córdoba todo un grandísimo personaje en la Sevilla de su época, más conocido como Maese Rodrigo, quién nació en Carmona el 15 de Diciembre de 1444 y falleció el 20 de Enero de 1509, siendo enterrado en la Capilla del Colegio que actualmente es la que se encuentra en la Puerta de Jerez.

Destacó bastante Maese Rodrigo en la vida religiosa, cultural y social sevillana de finales del siglo XV y principios del XVI. Pues él fue quien fundó la Universidad de Sevilla, preocupándose desde hacía tiempo que su ciudad tuviera un centro cultural y no como hoy muchos políticos, que se pasan la cultura por donde ya saben.

En 1467 ya era clérigo de la Diócesis sevillana y Bachiller en Teología, siendo presentado para una beca en el Colegio de San Clemente de los Españoles de la ciudad italiana de Bolonia, donde residió ocho años y fue elegidos en1469 por el Claustro del Colegio para regir la cátedra de Teólogos. Doctorándose en Teología y Artes, en la que alcanzaría una gran formación jurídica en Bolonia, todo un buen orador, con estudios de hebreo y griego, formándose en literatura antigua, medieval y moderna, como se suele decir, una eminencia.

Marchó Maese Rodrigo en 1475 a Roma, donde conoció a importantes humanistas y su fama llegaría a los Reyes Católicos , quienes le nombraron visitador del reino de Sicilia, lugar donde compuso su "Vocabularium ecclesiasticum", incunable de 1596 y dedicado a la Reina Isabel. Un personaje culto, que en1504 sería durante unos meses Provisor en Sede vacante de la Diócesis Hispalense, tras la muerte del Arzobispo Juan de Zúñiga.

Como vemos, Maese Rodrigo fue muy cultisimo, algo más que demostrado por su parte al publicar tratados eclesiásticos como un "Manual de doctrina", el "Arte del bien morir" o el "Tratado de la inmortalidad del alma". Sin olvidarnos, que mostró un gran interés por el derecho, la poesía, la oratoria, la moral, la política, la economía y otras artes. Hoy ya quisieran muchos hacer  lo que hizo Maese con la cultura en Sevilla, llevarla a lo máximo, no a ninguna parte como hacen nuestros políticos actuales. Y antes de terminar, recordar, que fue Maese quien también tradujo el "Viaje de Marco Polo", un libro que se editó tres veces en vida de este inigualable personaje.

La Capilla de Santa María de Jesús .


Es la Capilla de Santa María de Jesús una de las grandes joyas que tiene Sevilla, la cual se encuentra en la Puerta de Jerez. A pesar de ser pequeña, digo grande por su historia, pues es el único resto que queda de la primera Universidad que tuvo Sevilla, fundada por Maese Rodrigo Fernández de Santaella en 1505 por una bula del famoso Papa Julio II, el que encargó al gran Miguel Ángel las pinturas del techo de la Capilla Sixtina.


Fue el Colegio Universitario derribado a principios del siglo XX para abrir la Avenida de la Constitución, salvándose al menos la Capilla. La que merece la pena por su larga historia ser visitada y de la que destacamos de su exterior, una magnífica ventana gótica, portada y la espadaña de ladrillo, siendo su interior de una sola nave con cubierta mudéjar de madera con una bóveda de nervaduras góticas.


Pero si nos tuviéramos que quedar con algo de la Capilla lo haríamos con el fabuloso retablo mayor pictórico, obra gótico tardío de Alejo Fernández hacia 1520. Un retablo donde aparece junto a la Virgen de la Antigua el fundador de la Universidad, Maese Rodrigo Fernández de Santaella.

Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder en su Prendimiento.


Foto ABC.


La imagen de Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder en su Prendimiento es obra del recordado y admirado imaginero Don Antonio Castillo Lastrucci, la que estrenó la Hermandad de los Panaderos con el grupo del misterio el Miércoles Santo de 1945.

Destacamos de la bella imagen su rostro. Por su serenidad y humildad que refleja, la que en esta vida hace bastante falta.

El San Juan de la Esperanza de Triana.


Este San Juan de la Hermandad de la Esperanza de Triana es obra del imaginero Luis Álvarez Duarte en 1968, obra realizada sobre la anterior imagen.


Del anterior San Juan sólo recuperó el cuerpo y los pies, siendo de nueva factura la cabeza y manos. Mide 1,78 metros y fue bendecido por el conocido Director Espiritual de la Hermandad Don José Sebastián y Bandarán.

La Capilla de los Marineros.



La Capilla de os Marineros se encuentra en la trianera calle Pureza, de estilo arquitectónico sevillano de la segunda mitad del siglo XVIII. Es de planta rectangular y en su portada vemos una imagen de barro cocido en una hornacina de la Inmaculada Concepción, obra del imaginero Antonio Illanes en 1962, portada que se corona por una espadaña.


Dicha Capilla se divide en tres naves, la central y dos laterales. Destacando de la misma el artesonado tallado de su techo, realizado en madera de pino procedente del desaparecido Colegio Villasis. Con una curiosa lámpara central, tallada en cristal del siglo XIX procedente del desaparecido Café Gran Brit.

El Cristo de las Tres Caídas de la Hermandad de la Esperanza de Triana.



El Cristo de las Tres Caídas de la Hermandad de la Esperanza de Triana está atribuido al escultor Marcos Cabrera, hacia 1595. Es una imagen realizada en madera y policromada de candelero para vestir, de 1,14 metros de alto.


Lleva la Cruz sobre el hombro izquierdo, y la mano derecha apoyada sobre una pequeña roca. De las restauraciones que ha tenido a lo largo de su historia destacamos la de Manuel Gutiérrez Reyes Cano a finales del siglo XIX, quien le cambió el primitivo pelo natural por una cabellera de pasta de madera, y la restauración de Luis Álvarez Duarte en 1983, modificando levemente el pelo y haciéndole un nuevo cuerpo por el ma estado que sufría.