La Virgen de la Soledad de Castilleja de la Cuesta.

La antigua, señorial y bellísima Virgen de la Soledad de Castilleja de la Cuesta fue Coronada el 18 e Junio del 2016, por la gran devoción que despertó siempre entre los hijos de su pueblo. Una imagen que tiene la curiosidad de estar en las distintas manifestaciones litúrgicas ataviada de formas diferentes. 

Es obra de autor anónimo la Virgen de la Soledad, realizada en el último tercio del siglo XVI, lo que la convierte en una de las imágenes de la Virgen más antiguas que procesionan en la Semana Santa. Como otras imágenes, también ha sido restaurada algunas veces, pero sin perder ese clásico rostro lleno de serenidad. Destacamos de las joyas que posee la Virgen, la magnífica corona del grandísimo orfebre Fernando Marmolejo Camargo.

Vírgenes como la de la Soledad en
Sevilla hay muchas, de otras épocas pero también de una incalculable valía por su valor  como por su historia. Simplemente hay que abrirse un poco más para darnos cuenta de todas las grandes obras de Vírgenes que atesora la Archidiócesis de Sevilla, la cual tiene un patrimonio enorme y muy desconocido por desgracia.

La Adoración de los Reyes Magos de Alejo Fernández de la Catedral de Sevilla.

Foto Wikipedia. Adoración de los Reyes Magos de Alejo Fernández .


Pintó el grandísimo pintor Alejo Fernández (siglo XVI) unas tablas de un tamaño considerable, las que fueron colocadas en la parte trasera de la viga del monumental retablo mayor de la Catedral sevillana. Hoy estas tablas se encuentran en la Sacristía de los Calices, dignas todas de ver.

De las tablas que Alejo pintó, es la más grande la de la Adoración de los Reyes Magos (297x175 cm). En la que vemos a la Virgen presentando al Niño a los Reyes. Este conjunto por los colores y la maestría en que está realizado, como los gestos de sus personajes demuestran la maestría una vez más del pintor Alejo Fernández.

La Virgen de Gracia de Marchena.


La preciosa imagen de Nuestra Señora de Gracia la podemos ver en la Iglesia de San Agustín de Marchena (Sevilla), la cual estuvo antes en una ermita fuera del pueblo donde estaban los Agustinos, para más tarde ser llevada por los religiosos al nuevo convento de Marchena en 1676.

De escuela sevillana del siglo XVI es la imagen de la Virgen de Gracia, obra atribuida por el recordado e incansable investigador y profesor Hernández Díaz al imaginero Roque Balduque a mediados del XVI. Una imagen que es muy parecida a otras que el artista realizó para algunas Iglesias de Sevilla, entrando la de Marchena entre las clásicas imágenes de las Vírgenes de Glorias Sevillanas por su elegante y sevillano estilo.

La difteria.



Es la difteria una de las enfermedades mas conocida salidas de África, la que está  provocada por infección de bacteriana grave y afecta las mucosas de la nariz y la garganta. Hoy gracias a Dios o a la Madre Naturaleza se da muy poco en los países desarrollados, pero sigue en los no tan desarrollados.

Empiezan los síntomas de la difteria a partir de los 2 o 5 días después de que una persona está infectada. ¿Como nos daremos cuenta de que estamos infectados? Pues sintiendo dolor de garganta y ronquera, dolor al tragar, inflamación de los ganglios, dolor de cuello, dificultad para respirar, fiebre alta o escalofríos como si estuviésemos bajo cero. Sería entonces cuando nos tendrían que poner una vacuna para salir de esta temida enfermedad.

La cultura.


La cultura importa un carajo en un pais lleno de imbéciles. Lo que solo importa es hacerle la pelota a unos cuantos analfabetos posicionados por una plaga de catetos que van de fino.

La Virgen de la Expectación de Castilleja de la Cuesta.



Esta bellísima Virgen de la Expectación, también conocida como Virgen de la O se encuentra en la Parroquia de Santiago Apóstol de Castilleja de la Cuesta, imagen traída en 1636 de la Iglesia de los Franciscanos de Olivares. Dicha imagen es obra anónima del siglo XVII , aunque algunos historiadores la han atribuido a Francisco de Ocampo.

La Virgen presenta el misterio de la Encarnación de Cristo en su seno. La que vemos arrodillada y las manos juntas con una expresión que nos recuerda mucho a algunas imágenes de la Virgen del gran Martínez Montañés por su dulzura, y un relicario a la altura de su seno del Niño en plata.

De toda la imagen destacamos su bello estofado de color rojizo y el manto verde, color de la esperanza con motivos decorativos vegetales. Toda una maravillosa advocación, por ser casi contada las que de ella han quedado en nuestra imaginería.