No me extraña que muchos quieran llevarte a Roma. No me extraña que al Papa le de por decir que vayas a Roma para la canonización de Madre María de la Purísima. No me extraña que haya un revuelo de buitres carroñeros criticando ya una decisión que todavía nada se sabe. No me extraña que ya no Roma, sino cualquier parte del mundo quiera que te lleven para que tus hijos e hijas del extranjero conozcan el rostro más bello de la cristiandad, ya no me extraña nada, porque si yo fuera romano y no pudiera ir a Sevilla a verte quedría que te trajeran para ver el milagro que hizo Dios de dejarte en Sevilla y llamarte Macarena.
Pero va a ser que no por mi parte Macarena, y aún que parezca egoísta, con todos mis respetos a los que pueda ofender. Pienso que la Macarena ya está en Roma, cada Madrugá que sale a pasearse por la Sevilla Eterna con la Centuria más romana que Sevilla ha conocido escoltando a su Hijo, el primer Macareno de la cristiandad, que a los sones de su romana Centuria nadie tiene él atrevimiento de sentenciarlo, por esto y por muchas cosas más, lo pida quien lo pida que la Macarena vaya a Roma, yo a Ti no te sacaba de San Gil como no fuese escoltada por ese río de plumas blancas y por supuesto en la Madrugá sevillana, que aquí es la Roma que entendemos, MACARENA.
Foto de F.Villapol.
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