Manos divinas de mi Señor de la Sentencia, esas que al tiempo para en la Madrugá más hermosa del mundo para hacerlo prisionero de su divina hermosura.
Manos divinas de mi Señor de la Sentencia, esas que de un momento a otro parecen arrancarse por Bulerías por calle Feria, donde las penas se guardan y todo es alegría.
Foto F.Pino.