La Cilla de Sevilla.


Nos encontramos a la antigua Cilla de Sevilla en la sevillana calle Santo Tomás, la cual fue realizada para el almacenamiento de granos para los diezmos al servicio de la Iglesia.

 Este edificio se construyó en el año 1770, bajo la dirección del arquitecto José de Silva, siendo adaptado en 1972 a Museo de Arte Contemporáneo, por lo que se añadió una planta más con buhardillas, y en los años 2000 y 2004 se reforma para formar parte del maravilloso Archivo de Indias. Con la curiosidad que se comunica con el mismo por un paso subterráneo bajo la calle.


El edificio de la Cilla fue adaptado para establecer en él las salas de consulta de documentación digitalizada, biblioteca, servicio de administración y salas de conferencias, las que hoy te da cualquiera. Es de planta rectangular con dos plantas de altura, y su interior se organiza con dos naves que están cubiertas de bóvedas vaídas apoyadas sobre pilares rectangulares y columnas de mármol. Destacando su fachada, la que se inspira en el Archivo de Indias como la portada, que podemos ver la Giralda entre dos jarrones de Azucena, emblema del Cabildo Catedralicio de Sevilla.


Llama la atención del edificio la torre de la muralla en un extremo de su fachada. Un edificio que está declarado Bien de Interés Cultural desde 1985, y el que como tantos otros merece ser visitado.