Que bien me viene.


Que bien me viene el nombre de Arrimadas para arrimarme a mi amigo, el enemigo de casi todos los españoles.

La bailaora Manuela Vargas.



Foto El Mundo.


La bailaora Manuela Vargas empezó a trabajar a los doce años en el tablao "El Guajiro", junto con el gran maestro Enrique El Cojo, pasando del citado tablao al del Duende. Siendo en 1964, cuando ganó el Premio Internacional de Danza de Teatro de las Naciones de París con el espectáculo Antología dramática de flamenco, de José Monleón, quien inició su carrera internacional.

Manuela Vargas estuvo en 1965 en el pabellón español de la Feria Mundial de Nueva York,  en 1966 actúa en el Teatro "Prince of Wales" de Londres y en 1969 triunfa en el Teatro Avenida de Buenos Aires. Tras su regreso de la gira americana, recibió el importante Premio Nacional de Baile Flamenco por la Cátedra de Flamencología de Jerez de la Frontera.

Nuestra artista falleció el 12 de Octubre de 2007 en Madrid con tan sólo 66 años de edad, por el maldito cáncer que padecía, la cual recibió un año antes de su muerte la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes. Está enterrada en el Cementerio de San Fernando de Sevilla. 


El sevillano Francisco de Saavedra.


Saavedra pintado por el genial Goya.


Tumba de Saavedra en la Iglesia de la Magdalena en Sevilla.


Nació Juan Francisco de Saavedra y Sangronís en Sevilla el 4 de Octubre de 1746, y falleció el 25 de Noviembre de 1819, siendo un destacado militar, funcionario y diplomático español. Altas responsabilidades desempeñó Saavedra tanto en España como en América durante el reinado de Carlos III, destacando por su actuación como comisario regio en la expulsión de los ingleses del Golfo de México y en el apoyo español a la independencia de las colonias británicas de Norteamérica.

Fue Carlos IV, quien nombró secretario de Hacienda y Estado a Saavedra, y de nuevo por Fernando VII. Llegando a ser designado por los españoles presidente de la Junta Suprema de España e Indias y Regente del Reino durante la ocupación francesa. Por esto, se le concedió el reconocimiento de caballero de la Real y distinguida Orden de Carlos III.

Hay que recordar, que Saavedra fue teólogo en sus primeros años. Y estudio recibiendo el grado de doctor en la Universidad de Granada, quien hizo unas brillantes oposiciones a la Lectoral de Cádiz, e ingresó en la Real Academia de Buenas Letras de Sevilla en 1767. Cambiando un año más tarde las letras por las armas,  ingresando como cadete en el Regimiento Inmemorial del Rey, donde inició una brillantísima carrera militar.

Nuestro personaje se encuentra enterrado en la sevillana Iglesia de la Magdalena en su Capilla Sacramental, en la que su epitafio dice:
«Aquí yace el Excelentísimo Sr. Doctor D. Francisco Arias de Saavedra, caballero gran Cruz de la Real orden de Carlos III; ministro de Estado y de Hacienda, y profundo conocedor de la ciencia administrativa, que practicó en ambos mundos con utilidad pública. Sevilla lo aclamó presidente de la junta creada en 1808 para defender la independencia nacional contra el emperador de los franceses, vecinos por primera vez en Bailén y Cádiz, bajo su presidencia. En la disolución de la Junta central, reunió en Cádiz los restos de la monarquía, y fue nombrado Regente de la nación. Evacuada esta de sus invasores volvió a Sevilla que la admiró en sus últimos años, consagrados exclusivamente al ejército de la más ilustrada piedad y oficiosa beneficencia. El 25 de noviembre de 1819 murió en Sevilla, donde había nacido el 4 de octubre de 1746».