Fue allá por 1978, cuando la Virgen de Regla de Chipiona (Cádiz) sufrió un robo y profanación de la imagen, por esto y no por otra cosa como pensaron las malas lenguas llenas de venenos igual que hoy, María Auxiliadora decidió no sacar en sus salidas procesionales durante varios años la corona de oro, siendo sustituida por la que luce a diario.
Todo lo ocurrido despertó la polémica, que es patrona de los cofrades en decir la barbaridades como la que dijeron, que también le había sido robada y que lo mantenían en secreto, lo que era totalmente falso. Todo fue un exceso de prudencia por parte de la Hermandad durante la regresiva etapa postconciliar. Como antes, igual hoy, cualquier aburrido cofrade es capaz de levantar una calumnia en menos de un segundo y un montón de gilipollas creérselo.
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