Fue el primer Papa San Pedro, llamado realmente Simón bar Jonás, quien fue crucificado en el año 65 d. de C. por orden del emperador Nerón. Condenado a morir en la cruz, Pedro pidió ser crucificado cabeza abajo por considerarse indigno de morir de la misma forma que Jesucristo.
Hoy un montón de personajes que a la Iglesia pertenecen y no aportan un carajo, también deberían de ser crucificado cabeza abajo.
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