Tuvo la Hermandad del Gran Poder un Simpecado del XIX, pieza anónima bordada en terciopelo morado y compuesto por el anagrama de María, realizado con palmas entrelazadas y rodeando a este unos rayos lisos.
Esta pieza la tuvo la Hermandad de la Estrella y San Gonzalo, y fue sustituida en la Hermandad del Gran Poder por otra que realizó Rodríguez Ojeda. Siendo curioso, que cuando estuvo con la trianera Hermandad las Penas, dicha insignia se trasladó hasta Roma para la Proclamación de la Realeza de María el 1 de noviembre de 1954, organizando el Cardenal Segura una peregrinación a la que acudieron muchas Hermandades de la provincia de Sevilla con sus estandartes marianos, entre ellas la Hermandad trianera de las Penas con el Simpecado.
Hoy está histórica pieza se encuentra en la Hermandad del Silencio de Sanlúcar de Barrameda, quien la adquirió en un anticuario sevillano. Una pieza histórica y a la vez de museo, que una vez más perdió Sevilla.
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