Segun algunos historiadores, la fundación del convento de San Leandro fue hacia 1295. Pero los primeros documentos y noticias que se tienen del mismo son unas cartas fechadas el 15 de Agosto y 8 de Noviembre de 1309, constando que la fundación es de tiempo del rey Fernando IV, el Emplazado.
Este convento se ubicó al principio en un lugar conocido como el Degolladero de los Cristianos o Campo de los Mártires. Pero debido a que dicho lugar no era el más apropiado para las monjas, por estar lleno de ladrones, en tiempos del rey Pedro I, se le otorgó una real licencia que le permitió trasladarse a unas casas de la calle Melgarejo en la collación de San Marcos. Que por su pequeñez tuvieron que abandonarla ocupando definitivamente otras casas en la collación de San Ildefonso, estando regido por monjas Agustinas bajo la advocación de San Leandro.
El templo es de comienzos del siglo XVII, y está atribuido a Juan de Oviedo, siendo su retablo mayor de grandes dimensiones en el que destacan unos relieves del Bautismo y Flagelación de Cristo y la Adoración de los Reyes Magos, realizados por el gran escultor Jerónimo Hernández, los cuales proceden del antiguo retablo. También son de una gran calidad otros dos retablos laterales de San Juan Bautista y San Juan Evangelista, ambos de Juan Martínez Montañez, "el Dios de la madera", como un maravilloso Niño Jesús denominado el Quitapesares, obra de Luisa Roldán, conocida como La Roldana.
Destaca entre su orfebrería un cáliz renacentista decorado con guirnaldas de fruta del siglo XVI, un cáliz barroco del siglo XVIII y una custodia de plata de estilo renacentista del XVII. No se olviden si algún día vais por primera vez, probar las muy buenas <<Yemas de San Leandro>>.
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