El vestir de las imágenes.

Ya en 1604 tuvo que intervenir en las disposiciones del Sínodo el arzobispado sevillano mandando, que las Imágenes vistan con toda honestidad y en ningún caso las toquen con copetes, ni rizos ni arandelas, ni con hábito indecente.

 Igualmente la costumbre de colocarles abundantes joyas, donadas o prestadas, está hoy afortunadamente en desuso.

Hoy lamentablemente se le sigue poniendo a muchas imágenes cosas fuera de su sitio y no pasa nada, porque es tal y tiene mucho prestigio. Pues sea la Hermandad que sea, si lo que le ponen a algunas Dolorosas está fuera de sitio  se le debería de corregir, para que otras que suelen copiar lo malo y no lo bueno dejen de hacer carajotadas.